2019
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Desde el Indicador de Economía me piden un artículo relacionado. Últimamente se habla mucho de sostenibilidad y sobretodo de cambio climático y más esta semana con la cumbre del clima de Madrid, la marcha por la sostenibilidad y la Greta Thumberg. Para hacer el artículo, aprovechando que es 6 de Diciembre, me he documentado y mientras lo hacía, tenía mis dos hijos de 7 y 11 años jugando por el alrededor. Después de todo el día, solo me salía una conclusión:
Así que vuelvo a mirar mis hijos y me los imagino de aquí 30 años. Qué rabia que hace todo ello.
El incremento de las temperaturas de la atmósfera se debe a los famosos gases de efecto invernadero, el principal de los cuales es el CO₂. Desde el inicio de la revolución industrial ya se han producido el 65% de las emisiones que podría tolerar el clima a nivel planetario. Pero no se trata solo de incremento de temperaturas.
Hay varios problemas que afectan el planeta: el incremento de los residuos provocados por el hombre: microplàstics, islas de plástico, residuos industriales, residuos tecnológicos,... edificios y construcciones en desuso por todas partes, Monocultivos agrícolas que reducen la biodiversidad, a la selva amazónica, pero también en casa nuestra, el crecimiento vertiginoso de la población humana y de los recursos necesarios para alcanzarla.
El capitalismo, este modelo económico que se guía por el crecimiento y la acumulación, está al última: las empresas que triunfan sueño las que más crecen, los estados solo funcionan si crecen. El objetivo para todos es crecer. Crecer permite asegurar mejor los rendimientos futuros, o al menos lo ha estado hasta ahora.
Las consecuencias serán globales, pero también locales. En casa nuestra tendremos veranos más calurosos y más secos, tanto calurosos y secos que habrán facilitado toda una serie de incendios forestales, el Delta quedará casi sumergido, sin punta del cuerno ni isla de Buda.
Solo se podrá mitigar el cambio climático y los impactos sobre el medio ambiente si se toman decisiones drásticas y urgentes a todos niveles. Como ciudadanos, como empresas, como consumidores, como administración pública, como estados,...
Hay que informarse, sensibilizarse y preocuparse, priorizar. Asumir cada cual sus responsabilidades. Algo más que nuestro granito de arena. Hay que renunciar y tomar decisiones drásticas.
Dado que el indicador de economía es un diario dirigido a las empresas y el sector económico, 7 tips para empezar a hacer las cosas de otro modo:
Principios de economía circular. Analizar los propios procesos productivos de productos y servicios. Identificar el derroche de recursos. Producir en clave más sostenible y circular. Revisar los procesos productivos para reducir el consumo de energía, de envases la producción de residuos o tener en cuenta la capacidad de recuperar un determinado residuo.
Posar la sostenibilidad en los objetivos de la empresa: “ser una empresa de 0 emisiones”, “ser una empresa de impacto ambiental 0”.
Trabajar la movilidad: evitar desplazamientos de trabajadores y materiales. Cambiar los vehículos por vehículos menos contaminantes, favorecer la utilización de transporte público o intentar reducir los desplazamientos de trabajadores, proveedores y clientes.
Ser eficientes en el gasto de luz, calefacción, aire acondicionado. Este verano no tendríamos que ver la combinación de aire acondicionado y chaqueta.
Contratar proveedores sostenibles. Por ejemplo, tener una empresa energética que solo elabora energía a partir de renovables. Evitar la compra de productos que vienen de China, de India, Australia o Chile. Si trabajamos con producto fresco, hacerlo con producto de temporada.
Transmitimos los valores de sostenibilidad de nuestro negocio hacia el exterior, a nuestros productos y a nuestros clientes. Promover la responsabilidad social ligada a la conservación del planeta.
Promover el territorio. Favorecemos que la economía se diversifique y que la riqueza también se traslade a los pueblos de interior, para que no acabe ni en monocultivos salvajes, ni en trozos abandonados y pueblos deshabitados. En nuestros campos y jardines eliminamos productos fitosanitarios.
Creo pero que 2019 ha sido el año del cambio en la mentalidad respeto la sostenibilidad. Hay emprendidas cómo Estrella Damm que ha centrado su mensaje publicitario en la protección del entorno. BASF empresa nostrada que ha posado el futuro sostenible en el centro de su estrategia como empresa. También ha sido el año donde se ha recibido el impacto del follón climático: las trombas de agua de Octubre, la mortandad de peces del mar menor, el incendio a la Ribera de Ebro, la embestida al Delta del Ebro, las noticias sobre microplàstics a los peces que nos comemos. Y esto en general, ha hecho reaccionar en la población.
Autor: Hildebrand Salvat. Director Tècnic i Soci del Gabinet Ceres.
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